—Merel, tráeme las cinco columnas —me pide diariamente el Director del periódico.
En la noche la frase retumba en mi cerebro, hasta adquirir el insistente ritmo voluptuoso de "reggae", impidiéndome conciliar el sueño. Soy el único reportero en el tabloide vespertino HOY X HOY. Aunque parezca increíble no publicamos fotos de "hembras ombligo afuera"; de "bebés guardados en bolsas plásticas"; ni de hombres "machete sangriento". Por eso el tabloide, aunque circula poco, es talentoso y bonito. Me encanta mi trabajo pero para poder cumplir, tengo que dormir. El "Merel traéme las cinco columnas" no me deja. Por eso hoy hago lo que hago.
A las siete de la noche voy a entrevistar a ese fatuo político arrabalero —nuevo rico que mete la mano en todos los bolsillos de proyectos estatales que encuentra; y entre las hendiduras de los senos femeninos que cambian caricias por ascensos. Y mientras tanto su familia pasa hambre porque por ser gente humilde, si la mira no la ve.
Sé que asistirá a la cita porque le he asegurado que él será el tema principal en la edición de mañana.
Verteré el veneno en el último whisky que se tome. El curandero me aseguró que es insípido y no deja huellas. La acción será lenta y le permitirá llegar hasta el lujoso departamento de soltero que ocupa. Conozco sus costumbres por lo que no dudo que se tirará sobre el sofá-cama sin desvertirse. No surgirán sospechas porque él ha sufrido varios colapsos. Yo ya he escrito por anticipado el reportaje, y podré dormir tranquilo. Cumpliendo con mi deber, entregaré temprano al Director de HOY X HOY la sensacional historia para "las cinco columnas". Y así también honraré mi palabra de periodista, porque como le prometí al fachendoso político, mañana será noticia de primera plana, con fotos de última hora.
---
© 2007, Madelag
Puedes saber más acerca de la autora [[AQUÍ]].
1 comentario:
Me encanta este macabro cuento...
Publicar un comentario