Qué extraño, pensó mientras se ponía el cañón del revolver en la boca, siento como si esto lo hubiera hecho antes. ¿Para qué matarse dos veces? Tiró el arma y se durmió.
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© 2007, Carlos Fong
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Literatura en miniatura: el arte de lo súbito y lo preciso.
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4 comentarios:
Este es un texto exquisito que en lo personal me encanta, visual, condensado, estético Y SORPRENDENTE... Todo a la vez. Congrats C.F.
Siento predilección por los textos donde la violencia es sutil, como una almohada, porque el acto violento no es el clímax, sino la consideración de las razones. Carlos, este texto es divino. Muy a mi gusto. Un bombón, se derrite y degluto.
Lili Mendoza
Amigofong:disparas al objetivo y no yerras. Dormir-morir juego de verbos que tú manejas con propiedad e irreverencia sublimes.
Juro que nunca compraré una pistola, ni de juguete.
No por gusto Carlos se ganó el Maga de cuento breve con este texto... ¡Magistral!
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